Innovación en UK - Durham

Durham, una ciudad salida de un cuentro de hadas y poco conocida, era nuestra nueva parada. Luego de unos 5 días en Londres partimos a Durham. Ya más adaptado al calor que me impidió dormir los primeros tres días y sin el efecto que deja el cambio de horario.

No se sí el plan inicial era ir en bus, o por la huelga de los choferes de trenes prefirieron llevarnos en bus. El camino duro varias horas. Eran caminos rectos sin muchos cambios en el paisaje, siempre rodeado de campos verdes. Un gran contraste en comparación con la bulliciosa Londres. Antes de llegar al hotel, unos compañeros de tailandia pidieron hacer una parada. Llegamos al "Ángel del Norte", una estructura gigantesca en forma ángel cuyas alas parecian las alas de avión. Así nos recibia la región de Northumberland, de la cual solo había escuchado por alguna serie de vikingos en Netflix.

Durham fue uno de esos lugares que nunca esperas conocer pero que te impresionan de tal forma que los recordarás por siempre. En Durham pudimos descansar al llegar, era nuestro día libre, sin charlas o capacitaciones. El hotel era muy grande y rodeado de campos de golf, tenía varios restaurante y varias opciones para turismo. Encontré un folleto que indicaba que estabamos cerca al muro de Adriano, que en su epoca sirvio para delimitar el territorio Romano. Además, tenía piscina y no podía dejar pasar esa oportunidad. Era sábado, ya tarde y el domingo tedríamos el día libre. Un bus nos esperaría para llegar a Newcastle y el pueblo de Durham.

El domingo, no muy temprano, después de ir a nadar y un buen desayuno, perdimos el bus de ida a Newcastle. Sin embargo, no ibamos a quedarnos en el hotel, así que pedimos un uber y en 20 minutos llegamos a Newcastle. Nuestra primera parada era el Castillo de Newcastle. El castillo tenía un gran salón que podía ser visto desde varios niveles y una gran escalera circular que llegaba hasta lo más alto de la torre que permitia el paso por los distintos niveles. Se tenía una gran vista de la ciudad desde lo alto de la torre. Luego del castillo, pasamos a la iglesia de Newcastle, con un piano espectacular que tuvimos la suerte de escuchar. Un cartel indicaba que podia sorprender al visitante en algunas ocasiones. De ahí partimos al centro de Newcastle, donde se erigia el Grey's monument. La calle principal cuenta con númerosos edificios estilo romano, un recuerdo de epocas antiguas. Luego de pasear por el centro, buscamos la estación de tren para ir a Durham. Un corto viaje en tren de 10 minutos separa Newcastle de Durham.

Como indique al comienzo, Durham es un pueblo muy misterioso. En lo alto de una colina rodeada por un río se encuentra su catedral. La catedral por sí sola ya es un destino único. Siendo esta catedral uno de los lugares de grabación para la pelicula de Harry Potter y la Piedra Filosofal. Frente a la catedral se encuentra el castillo de Durham, el cual tiene un inmenso comedor que inspiro al de Howargts. De esta manera se terminaba nuestro primer fin de semana en Reino Unido y empezaba una nueva semana de increibles capacitaciones.

La universidad de Durham esta rodeada de muchas áreas verdes. Las aulas donde recibimos las capacitaciones eran muy amplias e iluminadas, permitiendote ver sus increíbles alrededores. Las charlas fueron sobre innovación, protección intelectual e invitados que nos contaron sus experiencias al llevar sus productos al mercado. El ecosistema es increiblemente variado y ofrece muchas oportunidades para hacer crecer un negocio. Su ecosistema formado por incubadoras, expertos en escalamiento, protección del negocio son el perfecto lugar para que surjan jóvenes e innovadoras empresas que buscan mejorar la sociedad. Una muestra de lo que se puede lograr en un ambiente que estimula y permite desarrollar al máximo el potencial de cada persona.